Muchas gracias por estar otra semana más ahí,
Esta semana hemos recibido un comentario en una publicación de redes sociales que nos ha llamado la atención y queríamos compartirla y comentarla.
Era algo así como: «¿Y tú qué vendes, pisos o muebles? Yo tengo una inmobiliaria y las inmobiliarias vendemos paredes, suelo y techos. Lo que haces me parece un trabajo inútil». (Mucho más extenso, pero se resume en eso).
Pues sí, somos una inmobiliaria, y por supuesto que vendemos paredes, suelos y techos.
Pero nuestra forma de trabajar, va mucho más allá, «nuestro trabajo cambia vidas».
Porque vendemos viviendas que llevan mucho tiempo estancadas, tal vez de familias que necesitan ese dinero para comprar otra vivienda, para la universidad de sus hijos, para mudarse a otro lugar, o para liquidar una deuda.
También vendemos viviendas de herencias, y ayudamos a transitar esa etapa tan difícil que es el duelo.
También vendemos viviendas de muchas otras situaciones, todas ellas diferentes, que son el inicio de otras muchas situaciones nuevas.
Cada persona tiene su propio motivo.
Pensar que nuestro trabajo se limita a vender, suelos, paredes y techos nos parece una forma muy limitada de verlo.
Y por eso, nuestra forma de trabajar es diferente.
Cuidamos cada detalle:
Desde cómo presentamos cada vivienda hasta cómo acompañamos a las personas en el proceso, porque detrás de cada venta hay historias, decisiones difíciles, emociones encontradas y mucha ilusión por lo que viene después.
No se trata solo de hacer una foto y de colocar un cartel.
Se trata de escuchar, de entender lo que necesita cada parte, y de encontrar ese punto de encuentro donde todo cobra sentido.
¿Vendemos viviendas? Claro que sí.
Pero también vendemos nuevos comienzos, tranquilidad, alivio, ilusión, y sobre todo, confianza.
Para nosotras esto no es un negocio de clientes y ladrillos.
Estamos viviendo nuestro sueño y ayudamos a muchos otros a que vivan el suyo.
¿Tú qué opinas?
¡Con cariño!
Rocío y Mónica
